Cuando se dice que la edición 2021 de la Copa América con sede en Colombia está “más firme que nunca”, no se trata de una expresión popular, ya que fue el mismo ministro del Deporte, Ernesto Lucena, quien usó estas palabras.
Al igual que el presidente Iván Duque, Lucena explicó que el torneo seguirá tal y como se ha venido planificando. El funcionario indicó que las razones por las cuales se tomó esa decisión giran en torno a “los compromisos con la Conmebol” y al amplio presupuesto que ya se ha invertido para hacer de Colombia una ‘tacita de plata’ y recibir a las selecciones participantes.
Recordemos que hace un par de meses Mindeportes tenía planteado que los estadios pudiesen albergar el 30% de su aforo, pero este martes anunció que durante los partidos no habrá público, esto con el objetivo de evitar convertir la competencia en un foco de contagios y propagación de la COVID-19.
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Aunque a primera vista, esta medida se trataría de una decisión sensata, la verdad no ha tenido gran acogida en gran parte de los colombianos, ya que muchos aseguran que “el fútbol sin público es un negocio”, y que así no vale la pena.
En el mismo sentido, y haciendo referencia al tema de la pandemia, otro sector de la población considera que es imprudente llevar a cabo el torneo. Incluso, con ironía y sarcasmo, algunos se han expresado a través de las redes sociales, involucrando temas como el Plan de Vacunación.
Lo cierto es que, independientemente de si estamos o no de acuerdo, la competencia continental en suelo cafetero es prácticamente un hecho.
Por su parte, en Argentina, la otra sede de este certamen deportivo, el presidente Alberto Fernández declaró hace unos días que “Salir de la Argentina, e ir a jugar a lugares donde los contagios son importantes (…) Si se hace, habrá que extremar todos los cuidados. Sin salir de la Argentina, los equipos están teniendo un alto nivel de contagios, saliendo de la Argentina todo puede ser peor”.
La anterior declaración pone en duda la estabilidad de este país como sede compartida de la competencia, ya que de acuerdo con el mismo presidente Fernández, su intención no es frustrar el evento, pero deberá primero evaluar cómo avanza la ola de contagios en su país.
¿Qué opinas sobre esta decisión del gobierno colombiano? Déjanos saberlo en los comentarios.
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