Un caníbal, que se hacía pasar por cirujano, extraía las partes de sus pacientes para luego comérselas. Según reveló el diario El Tiempo, el hombre guardaba los órganos en un congelador para conservar la carne.
Cirugía ilegal
El aberrante hecho ocurrió en Oklahoma, Estados Unidos, donde el hombre de 54 años fue condenado por un tribunal local a doce años de cárcel.
El sujeto, identificado como Bob Lee Allen, se le declaró culpable del delito de conspiración para cometer cirugía ilegal y otros cargos menores.
De hecho, el mismo hombre confesó haber realizado una operación de castración a un joven, de 28 años, con el objetivo de comerse su órgano reproductor.
Según indicaron medios locales, la víctima contactó al falso cirujano por medio de un foro de cirugías clandestinas en Norteamérica.
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Como vendiendo pan
El fingido cirujano ofrecía sus servicios de manera gratuita y se presentaba como un médico con amplia experiencia en dichos procedimientos. Por tal motivo, el joven decidió confiar en las manos del ‘cincuentón’.
De acuerdo con las declaraciones del joven, el caníbal lo citó en una cabaña alquilada, donde fue intervenido quirúrgicamente en una mesa de comedor de madera.
Con la asistencia de su pareja, Lee Allen logró desmembrar al paciente, pese a haberle aplicado poca anestesia local en la zona a operar.
Sin embargo, el joven perdió mucha sangre durante la cirugía, lo que puso en evidencia lo ilegal del procedimiento y tuvo que recibir ayuda de un médico de verdad.
Durante la indagatoria, la víctima contó que el supuesto cirujano le había confesado que guardaría su pene en un congelador para después ingerirlo.
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